Uno de los principales exportadores de productos hidrobiológicos congelados en Perú, Coinrefri SRL, ha intensificado su inversión en tecnologías para ofrecer al mercado más productos con mayor valor añadido. Con el fin de satisfacer eficientemente el aumento de la demanda desde 2016, la compañía invirtió en una asociación con Marel, que aportó soluciones de automatización para las operaciones de procesamiento y envasado final de las plantas de Paita y Tacna.
“Durante mucho tiempo, la mayoría de nuestros clientes eran importadores que distribuían el pescado a otras industrias para su posterior procesamiento. A lo largo de los años, hemos identificado la creciente demanda de productos para venta al por menor (supermercados) y HoReCa (Hoteles, Restaurantes y Catering)”, dice el director general, Francisco Takahashi Iguchi.
Para servir a los sectores minorista y HoReCa, la empresa buscó soluciones para automatizar el proceso de envasado con el fin de diversificar la oferta de productos con mayor valor agregado para los consumidores finales. Para ello, se invirtió en equipos de las líneas de clasificación, loteado y pesaje, chequeo de peso y finalmente porcionado de Marel.
En la planta de Paita, donde se procesan calamares gigantes, merluzas, concha de abanico y mahi-mahi, las necesidades se centraban en el procesamiento secundario y el envasado, la agilidad de las líneas y el control del sobrepeso. Se instalaron la maquina clasificadora SmartLine, dos Clasificadoras Compactas y una TargetBatcher de Marel, además de básculas de mesa y chequeadores de peso con detección de metales para resolver los problemas.
En la planta de Tacna, donde se procesa la trucha del Lago Titicaca, las demandas surgieron al principio de la línea en el procesamiento primario del pescado fresco.
"Cuando comenzamos a operar con la trucha, el procesamiento primario era muy manual, y decidimos implementar equipos que automatizaran estos procesos, como el removedora de espinas, una línea de desespinado y una lavadora de filetes. Después, optamos por complementar el proceso final con una TargetBatcher y una Clasificadora Compacta", informa el director general.
La demanda de los minoristas aumentó exponencialmente en el año 2020 y a principios de 2021. "La pandemia de Covid-19 ha reforzado la demanda de productos listos para comer y cocinar y de porciones de peso fijo. Necesitábamos ser más eficientes en el proceso de corte de las porciones", afirma Francisco Takahashi Iguchi.
A principios de 2020, Coinrefri adquirió una porcionadora I-Cut 130 para porciones de mahi-mahi con el fin de atender eficazmente este mercado. El equipo fue instalado por Marel en octubre de 2020, con la ayuda de un soporte remoto debido a las restricciones de viajes. El servicio se realizó al inicio de la temporada de pesca del mahi-mahi en Perú, lo que aseguró la estructura necesaria para atender esta demanda con mayor rendimiento económico en el proceso de porcionado.
Además de la calidad de los equipos y el software, la asistencia técnica y comercial de Marel fue un factor determinante en la decisión final de Coinrefri. La interacción entre los equipos contribuyó al éxito de la asociación. Dados los resultados positivos, la empresa también firmó acuerdos de nivel de servicio para los equipos en funcionamiento y planificó futuras inversiones, centrándose en la eficiencia del proceso.
"Pudimos evaluar claramente el retorno de la inversión de los equipos Marel, tanto en la reducción del número de trabajadores en las líneas, como en la flexibilidad de las operaciones y en el control del peso final de las porciones y del envasado. De este modo, respondemos mejor a las demandas del mercado", declara Francisco Takahashi Iguchi.
Fuente: marel.com